Cada vez más chapines aportan territorios propios para la conservación del medio ambiente Por: Amilcar Avila
A pesar del deterioro ambiental que se acelera en Guatemala, hay esfuerzos que parecen aportar luces en la oscuridad. El interés voluntario de los chapines por contribuir en la conservación del medio ambiente está aumentando, según se ve reflejado en el crecimiento de las reservas naturales privadas.
De acuerdo con el Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap), en 2005 se contabilizaban 54 reservas privadas. Ahora la cantidad de áreas verdes asciende a 159 reservas, con un total de 61 mil hectáreas.
“La importancia es la conservación de la biodiversidad, pues buscamos formar corredores biológicos. Además, son nuestros escudos naturales ante los desastres”, dice Claudia García, directora ejecutiva de la Asociación de Reservas Naturales Privadas de Guatemala.
Este auge se confirma con 40 reservas más en proceso de aprobación en Conap. Guatemala lidera ese proceso en la región.
Sobre las zonas
- Algunas de las reservas privadas ofrecen turismo de aventura, ornitología, canopy, investigación, sitios arqueológicos, producción orgánica y de truchas o café.
- Estas áreas son privadas y al ser aprobadas por Conap integran el Sistema Guatemalteco de Áreas Protegidas (Sigap).
- Muchos de estos espacios poseen cantidad significativa de bosque natural y cumplen funciones de reservorio y captación de agua, madera, medicinas y refugios de flora y fauna.
- Para más información, puedes visitar el sitio electrónico: www.reservasdeguatemala.org. También puedes acudir a Anacafé.
Preservar el ambienteAnálisis de: Claudia García, directora ejecutiva Asociación Reservas Privadas
La importancia de contar con estas áreas radica en que se necesita unir los territorios para establecer corredores biológicos que permitan la conservación de la biodiversi- dad de flora y fauna y así mejorar el medio ambiente de Guatemala.
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